miércoles, 19 de febrero de 2014
CANCIÓN OCULTA
Escucharla escondida.
Sentirla en la espesura
sin saber otra cosa
del ave que su canto.
Y que la noche impura
jamás pueda callarla.
Y que el arquero sólo
le dé caza en sus sueños.
De Razón de la impostura. 2003
lunes, 10 de febrero de 2014
A VECES UN FULGOR
A veces un fulgor,
una luz, de repente,
ilumina estos campos.
Un relámpago no.
No hay tormenta en mis noches
sonámbulas y pueden
escucharse lejanos
los cárabos, la fronda
inmensa del silencio
amparando el acecho,
la vigilia del agua.
Este campo es el mío.
Campo de mi memoria
en el que nadie vive
más que yo, que recorro
su vasta soledad
mirándome en el alto
espejo de los sueños,
para verme pasar
conmigo entre las pitas,
conmigo en esos ojos
turbios de los pastores,
ciegos de los carneros
con la noche tan negra,
Esa luz repentina, ese
fulgor es la linterna
fugaz de la memoria
que ilumina un momento
el campo de la dicha,
el secreto del bosque
donde anidan mis ojos.
De Oscura trashumancia. 1997
sábado, 1 de febrero de 2014
DIOSES
I
Hay noches, largas noches
sin lumbre en que me empeño
en hacer por fin una
vez mía la palabra.
Pero nunca es el mismo
quien escribe y aquél
del que hablan mis versos.
Yo jamás tuve el alma
tan en vilo ni en esa
constante inspiración
que el poema aparenta.
Las palabras nos hacen
amar lo que no existe,
fingir vidas ajenas.
Y acaban confundiendo
lo escrito y lo vivido,
lo mismo que los dioses
confunden su existencia
con el clamor oscuro
de quienes los invocan.
2
Con la misma avaricia
de esos dioses pequeños
que confunden su nombre
con la plegaria ajena,
aguardo a que tu boca
me absuelva o me maldiga.
Mi vida es la palabra.
Mi plenitud ser sólo
una voz en los labios
impuros de los hombres.
De Ofidia. 2005.
De Ofidia. 2005.
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